lunes, 25 de mayo de 2009
sábado, 23 de mayo de 2009
Reportaje exclusivo a Gabriel Mariotto, Interventor del ComFeR
LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL
El 20 de abril en Rosario se llevó a cabo el octavo Foro de consulta pública sobre el proyecto de Ley de Comunicación Audiovisual que impulsa el gobierno. Allí estuvo presente el Interventor del Comité Federal de Radiodifusión Gabriel Mariotto quien me concedió un reportaje exclusivo.
En el inicio del Foro, llevado a cabo en la Sede de Gobierno de la Universidad Nacional de Rosario, Mariotto disertó acerca de la relevancia del debate de la ley, de la importancia dada a la ciudadanía en la modificación de la misma, de lo poco usual de la modalidad y del referente que la misma será para la creación de cualquier otra ley de igual o mayor importancia social. Luego de haber terminado su exposición se retiró del escenario principal y se mezcló entre el público presente para escuchar las propuestas de los ciudadanos que orarían. Entonces, respondió a las siguientes preguntas.
¿Por qué se intenta implementar la ley hoy si en realidad desde hace 25 años que estamos con la ley de la dictadura?
Porque durante estos últimos 25 años triunfó la presión del establishment mediático, el silencio impuesto a la tergiversación, a la estigmatización.
Hoy tenemos a favor la madurez de la sociedad argentina, de todos los sectores y la vocación democrática de la presidenta de la nación que compromete al ejecutivo como nunca para elevar el proyecto al Congreso y la conducción colectiva que le da un soporte institucional, democrático, plural y diverso al proyecto.
Durante las décadas del ‘80 y ‘90 esa resignificación terminó cediendo frente a un discurso único, la política terminó cediendo frente a una agenda mediática. Pero la crisis del 2001 - 2002 puso en la escena otra vez a la política y la reconstrucción, y esa posibilidad de dar cuenta de los representantes de los sectores políticos de una idea también genera adhesión en la ciudadanía. Ya la agenda la pone la política y no la ponen los grandes medios de comunicación y la resignificación de la cultura popular encuentra su nueva herramienta.
¿Por qué esta metodología de debate público de la ley?
Porque son preceptos de la democracia, no son de ningún partido en particular.
Calculo que esta metodología se va implementar en otras leyes trascendentes para la Patria. Porque escuchamos entre todos a cada uno de los sectores y la experiencia de cada ciudadano le da un toque de fortaleza a la propuesta del proyecto. En este caso nosotros dimos el puntapié inicial tomando la referencia de aquella ley de educación superior que también caminó por todo el país y que también logró hacer una ley muy importante, muy trascendente. Pero en este caso la vocación federal de estos foros, la participación de la ciudadanía, el motor que le dan las universidades, piensan romper con ese silencio impuesto que todos, absolutamente todos, nos damos cuenta cuando discutimos de comunicación. Logramos revivir, refrescar, rescatar la vieja práctica de la resignificación que tiene la cultura popular cuando recibe información.
¿Esta ley no intenta aliviar la tensión que existe entre medios y gobierno?
Bueno, hay tensión entre gobierno y medios. En la época de la dictadura no había esa tensión, había unidad de concepción, los medios tenían la misma voz que tenía la junta militar. Nosotros no estamos en contra de que exista esa tensión lo que queremos es que exista pluralidad para que todas las expresiones culturales puedan llegar a estar. Y si hay monopolios no hay pluralidad, hay uno que asume la voz del resto.
No puede haber monopolio porque el monopolio y el oligopolio se hace cargo de la voz del resto. En nombre de la libertad de prensa una misma persona jurídica tiene todos los medios posibles o la mayoría de medios posibles en una misma área de cobertura. Entonces, la pregunta es inversa: ¿cuántas voces se quedan sin poder emitir? ¿Quién tiene que dar garantía de esa pluralidad? Una ley de la democracia y un estado plural participativo democrático que haga aplicar esa ley.
¿Qué les contestaría a quienes dicen que esta ley no es algo positivo para la sociedad ni para la comunicación en sí y que fue creada exclusivamente por la pelea del gobierno con Clarín?
Que lean la ley, porque es una ley que se basa en principios de derechos humanos y que la respalda la legislación internacional y es una ley de la democracia y de la pluralidad. Es al revés, mordaza hay hoy que hay un montón de sectores que están excluidos de la comunicación. Entonces no, que lean la ley y que sepan y que aprovechen la vocación democrática de la Presidenta de la Nación que ha instalado este tema sabiendo que en tiempos de campaña y en tiempos electorales de esto no se hablaba porque la presión de los grandes medios siempre logró doblarle la mano a la vocación democrática de nuestros representantes.
No se si todos sabemos que ayer por ejemplo en el partido de fútbol de Boca - River hubo manifestaciones en una tribuna pidiendo el “fútbol abierto”, pidiendo la emisión de los partidos de fútbol por canales de abiertos. Era muy difícil verlo por las propias cámaras que ingresan a los estadios pero cuando aparece por Internet la información por algún hincha o alguien nos cuenta nosotros sabemos advertir al silencio que estamos expuestos.
O cuando desde los sets de televisión se monta sospecha a que interferencias a un trasbordador de varias señales de una misma empresa son afectadas por una portadora en interferencias satelitales. Y sospechan que las interferencias son producto del debate de la ley. Y después se comprueba que apareció la portdora en algún lugar distinto de la Argentina, que había una señal de prueba en la Península de Yucatán que estaba realizando mal la señal que interfería esas señales. Pero la sospecha se monta, la información efectiva no nos llega. La gente sabe que nos están manipulando para no poder sacar esta ley.
Como ese caso hace 25 años que viene ocurriendo ya es viejo, ya es advertido y por eso estos foros le dan la fortaleza que el escenario mediático quiere despreciar.
¿Parece que fue más fácil modificar la Constitución Nacional que implementar una nueva ley de servicios de comunicación?
Bueno, porque la política en la década del ’90 tenía un anclaje en la decisión mediática también. Entonces, si los medios avalaban tal o cual acción política se podía hacer. Avalaron el Pacto de Olivos y avalaron la reforma de la Constitución. Ahora, después de la crisis y del 2001 – 2002 la democracia se pone en el centro de la escena, la política se pone a cambiar los resortes que estaban atando a regímenes anteriores, como el caso de la ley de la dictadura, y la agenda la construye la política. Y los medios no quieren perder aquel privilegio que la falta de ley de la democracia les ha asignado, entonces por eso se hace difícil. Pero se suple la falta de vocación de los medios con la ley de la democracia, con la gran participación de la ciudadanía.
¿No es una fantasía pensar que en el mismo momento que se instale la ley todo va a cambiar?
No. En el mismo momento que se instale la ley lo que hay que hacer es ajustarse a derecho, hay un año, porque nosotros damos un plazo. La propuesta del proyecto de ley dice un plazo para ajustarse a derecho y que no haya posiciones monopólicas en el mercado. Entonces, más allá de los titulares de frecuencia de determinados medios lo que no puede haber son esas posiciones dominantes que la ley establece claramente, no más de diez licencias a nivel nacional, no más de tres licencias en una misma área de cobertura. Hay algunas propiedades plisadas que no se pueden llevar adelante, como quien distribuye señales de cable no puede tener televisión abierta. Entonces, son una serie de normas que implican que la pluralidad en cualquier ciudad tiene que garantizarse.
¿Cómo se va a trabajar y qué medidas se van a tomar con las radios clandestinas?
Bueno, las radios que no están legalizadas en muchos casos han tenido permiso precario de radiodifusión a partir de 1989 - 1990, precisamente porque la ley de la dictadura entendía a la FM como un servicio complementario. Entonces, de hecho, la irrupción de emisoras de baja potencia ha sido considerado por el estado en esos años, han sido consideradas por el estado esas emisoras en los años ’89 – ‘90. Hay muchas que tienen incluso cautelares de la justicia, nosotros establecemos un régimen para darle la legalidad que la legitimidad de su acción ya vienen reclamando desde hace muchísimo tiempo.
¿Qué reflexión hace acerca de los debates que se han llevado a cabo en los variados lugares del país hasta el de hoy?
Bueno, muy bueno. Aquí tenemos más de 75 inscriptos casi 80 inscriptos a esta altura de la mañana y todos con una mirada interesante de la ley. Vamos a reconsiderar esos aportes. Y el enriquecimiento que le da la ciudadanía a la propuesta del proyecto de ley es muy fuerte.
No me cabe duda que después de terminar los foros, después de registrar todos los aportes de la ciudadanía al proyecto de ley y de conformar el proyecto definitivo que irá al Congreso los diputados y senadores van a sentir el respaldo de la vocación de la sociedad argentina de haber participado.
Y la experiencia que tenemos en estos foros, este creo es el octavo foro. Mañana vamos a Mendoza, pasado a San Juan, después a La Pampa. Los aportes realmente son enriquecedores, con miradas oblícuas a los casi 150 artículos de texto y que vienen a darle una profundidad al texto final que va a ser realmente su fortaleza.
El 20 de abril en Rosario se llevó a cabo el octavo Foro de consulta pública sobre el proyecto de Ley de Comunicación Audiovisual que impulsa el gobierno. Allí estuvo presente el Interventor del Comité Federal de Radiodifusión Gabriel Mariotto quien me concedió un reportaje exclusivo.
En el inicio del Foro, llevado a cabo en la Sede de Gobierno de la Universidad Nacional de Rosario, Mariotto disertó acerca de la relevancia del debate de la ley, de la importancia dada a la ciudadanía en la modificación de la misma, de lo poco usual de la modalidad y del referente que la misma será para la creación de cualquier otra ley de igual o mayor importancia social. Luego de haber terminado su exposición se retiró del escenario principal y se mezcló entre el público presente para escuchar las propuestas de los ciudadanos que orarían. Entonces, respondió a las siguientes preguntas.
¿Por qué se intenta implementar la ley hoy si en realidad desde hace 25 años que estamos con la ley de la dictadura?
Porque durante estos últimos 25 años triunfó la presión del establishment mediático, el silencio impuesto a la tergiversación, a la estigmatización.
Hoy tenemos a favor la madurez de la sociedad argentina, de todos los sectores y la vocación democrática de la presidenta de la nación que compromete al ejecutivo como nunca para elevar el proyecto al Congreso y la conducción colectiva que le da un soporte institucional, democrático, plural y diverso al proyecto.
Durante las décadas del ‘80 y ‘90 esa resignificación terminó cediendo frente a un discurso único, la política terminó cediendo frente a una agenda mediática. Pero la crisis del 2001 - 2002 puso en la escena otra vez a la política y la reconstrucción, y esa posibilidad de dar cuenta de los representantes de los sectores políticos de una idea también genera adhesión en la ciudadanía. Ya la agenda la pone la política y no la ponen los grandes medios de comunicación y la resignificación de la cultura popular encuentra su nueva herramienta.
¿Por qué esta metodología de debate público de la ley?
Porque son preceptos de la democracia, no son de ningún partido en particular.
Calculo que esta metodología se va implementar en otras leyes trascendentes para la Patria. Porque escuchamos entre todos a cada uno de los sectores y la experiencia de cada ciudadano le da un toque de fortaleza a la propuesta del proyecto. En este caso nosotros dimos el puntapié inicial tomando la referencia de aquella ley de educación superior que también caminó por todo el país y que también logró hacer una ley muy importante, muy trascendente. Pero en este caso la vocación federal de estos foros, la participación de la ciudadanía, el motor que le dan las universidades, piensan romper con ese silencio impuesto que todos, absolutamente todos, nos damos cuenta cuando discutimos de comunicación. Logramos revivir, refrescar, rescatar la vieja práctica de la resignificación que tiene la cultura popular cuando recibe información.
¿Esta ley no intenta aliviar la tensión que existe entre medios y gobierno?
Bueno, hay tensión entre gobierno y medios. En la época de la dictadura no había esa tensión, había unidad de concepción, los medios tenían la misma voz que tenía la junta militar. Nosotros no estamos en contra de que exista esa tensión lo que queremos es que exista pluralidad para que todas las expresiones culturales puedan llegar a estar. Y si hay monopolios no hay pluralidad, hay uno que asume la voz del resto.
No puede haber monopolio porque el monopolio y el oligopolio se hace cargo de la voz del resto. En nombre de la libertad de prensa una misma persona jurídica tiene todos los medios posibles o la mayoría de medios posibles en una misma área de cobertura. Entonces, la pregunta es inversa: ¿cuántas voces se quedan sin poder emitir? ¿Quién tiene que dar garantía de esa pluralidad? Una ley de la democracia y un estado plural participativo democrático que haga aplicar esa ley.
¿Qué les contestaría a quienes dicen que esta ley no es algo positivo para la sociedad ni para la comunicación en sí y que fue creada exclusivamente por la pelea del gobierno con Clarín?
Que lean la ley, porque es una ley que se basa en principios de derechos humanos y que la respalda la legislación internacional y es una ley de la democracia y de la pluralidad. Es al revés, mordaza hay hoy que hay un montón de sectores que están excluidos de la comunicación. Entonces no, que lean la ley y que sepan y que aprovechen la vocación democrática de la Presidenta de la Nación que ha instalado este tema sabiendo que en tiempos de campaña y en tiempos electorales de esto no se hablaba porque la presión de los grandes medios siempre logró doblarle la mano a la vocación democrática de nuestros representantes.
No se si todos sabemos que ayer por ejemplo en el partido de fútbol de Boca - River hubo manifestaciones en una tribuna pidiendo el “fútbol abierto”, pidiendo la emisión de los partidos de fútbol por canales de abiertos. Era muy difícil verlo por las propias cámaras que ingresan a los estadios pero cuando aparece por Internet la información por algún hincha o alguien nos cuenta nosotros sabemos advertir al silencio que estamos expuestos.
O cuando desde los sets de televisión se monta sospecha a que interferencias a un trasbordador de varias señales de una misma empresa son afectadas por una portadora en interferencias satelitales. Y sospechan que las interferencias son producto del debate de la ley. Y después se comprueba que apareció la portdora en algún lugar distinto de la Argentina, que había una señal de prueba en la Península de Yucatán que estaba realizando mal la señal que interfería esas señales. Pero la sospecha se monta, la información efectiva no nos llega. La gente sabe que nos están manipulando para no poder sacar esta ley.
Como ese caso hace 25 años que viene ocurriendo ya es viejo, ya es advertido y por eso estos foros le dan la fortaleza que el escenario mediático quiere despreciar.
¿Parece que fue más fácil modificar la Constitución Nacional que implementar una nueva ley de servicios de comunicación?
Bueno, porque la política en la década del ’90 tenía un anclaje en la decisión mediática también. Entonces, si los medios avalaban tal o cual acción política se podía hacer. Avalaron el Pacto de Olivos y avalaron la reforma de la Constitución. Ahora, después de la crisis y del 2001 – 2002 la democracia se pone en el centro de la escena, la política se pone a cambiar los resortes que estaban atando a regímenes anteriores, como el caso de la ley de la dictadura, y la agenda la construye la política. Y los medios no quieren perder aquel privilegio que la falta de ley de la democracia les ha asignado, entonces por eso se hace difícil. Pero se suple la falta de vocación de los medios con la ley de la democracia, con la gran participación de la ciudadanía.
¿No es una fantasía pensar que en el mismo momento que se instale la ley todo va a cambiar?
No. En el mismo momento que se instale la ley lo que hay que hacer es ajustarse a derecho, hay un año, porque nosotros damos un plazo. La propuesta del proyecto de ley dice un plazo para ajustarse a derecho y que no haya posiciones monopólicas en el mercado. Entonces, más allá de los titulares de frecuencia de determinados medios lo que no puede haber son esas posiciones dominantes que la ley establece claramente, no más de diez licencias a nivel nacional, no más de tres licencias en una misma área de cobertura. Hay algunas propiedades plisadas que no se pueden llevar adelante, como quien distribuye señales de cable no puede tener televisión abierta. Entonces, son una serie de normas que implican que la pluralidad en cualquier ciudad tiene que garantizarse.
¿Cómo se va a trabajar y qué medidas se van a tomar con las radios clandestinas?
Bueno, las radios que no están legalizadas en muchos casos han tenido permiso precario de radiodifusión a partir de 1989 - 1990, precisamente porque la ley de la dictadura entendía a la FM como un servicio complementario. Entonces, de hecho, la irrupción de emisoras de baja potencia ha sido considerado por el estado en esos años, han sido consideradas por el estado esas emisoras en los años ’89 – ‘90. Hay muchas que tienen incluso cautelares de la justicia, nosotros establecemos un régimen para darle la legalidad que la legitimidad de su acción ya vienen reclamando desde hace muchísimo tiempo.
¿Qué reflexión hace acerca de los debates que se han llevado a cabo en los variados lugares del país hasta el de hoy?
Bueno, muy bueno. Aquí tenemos más de 75 inscriptos casi 80 inscriptos a esta altura de la mañana y todos con una mirada interesante de la ley. Vamos a reconsiderar esos aportes. Y el enriquecimiento que le da la ciudadanía a la propuesta del proyecto de ley es muy fuerte.
No me cabe duda que después de terminar los foros, después de registrar todos los aportes de la ciudadanía al proyecto de ley y de conformar el proyecto definitivo que irá al Congreso los diputados y senadores van a sentir el respaldo de la vocación de la sociedad argentina de haber participado.
Y la experiencia que tenemos en estos foros, este creo es el octavo foro. Mañana vamos a Mendoza, pasado a San Juan, después a La Pampa. Los aportes realmente son enriquecedores, con miradas oblícuas a los casi 150 artículos de texto y que vienen a darle una profundidad al texto final que va a ser realmente su fortaleza.
foto: http://www.prensario.tv/
Octavo Foro Participativo de Consulta Pública – 20 de abril 2009 Rosario
Los foros son la forma de consulta y participación ciudadana que decidió implementar el Gobierno para darle forma definitiva al proyecto de ley que se debatirá en el Congreso.
Actualmente, ya se han llevado a cabo 18 foros en diferentes provincias: Salta, Mendoza, San Juan, La Pampa, Río Negro, Neuquén, Buenos Aires, La Rioja, Catamarca, Tucumán, entre otras. Y falta que se debata en varios lugares más del país.
En Rosario, el encuentro comenzó a partir de las 10.00 hs en la Sede de gobierno de la Universidad Nacional de Rosario, Maipú 1065, con la presencia del Diputado Nacional Agustín Rossi, el rector de la UNR, Darío Maiorana, el vicerrector Eduardo Seminara, el Secretario de Información Pública de la provincia de Santa Fe, Rubén Galassi y el interventor del Comfer Lic. Gabriel Mariotto.
El foro consistía en estar abierto a la participación de cualquier ciudadano, quien debía inscribirse en la entrada para luego ser llamado a disertar, y tenía un tiempo límite de 7 minutos para dar su discurso. Hubo más de 70 inscriptos, aunque al momento de ser llamados a realizar la exposición oral sólo se presentaron 50. A cada orador se le pidió que dejara en soporte impreso una copia de la disertación que hacía.
El aporte ciudadano fue de gran variedad, hubo representantes de comunicadores, periodistas, directivos de escuelas de periodismo y de la universidad, docentes universitarios, agrupaciones de indígenas, cooperativas, integrantes de la agrupación HIJOS, de Radio Comunitaria de Rosario, de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias.
A pesar de la diversidad de los participantes, todos coincidieron en la importancia de la sanción de una ley de la democracia, en la no vigencia de la ley 22.285 de la dictadura y en la modalidad de la consulta popular para la formulación definitiva del proyecto que irá al Congreso.
Actualmente, ya se han llevado a cabo 18 foros en diferentes provincias: Salta, Mendoza, San Juan, La Pampa, Río Negro, Neuquén, Buenos Aires, La Rioja, Catamarca, Tucumán, entre otras. Y falta que se debata en varios lugares más del país.
En Rosario, el encuentro comenzó a partir de las 10.00 hs en la Sede de gobierno de la Universidad Nacional de Rosario, Maipú 1065, con la presencia del Diputado Nacional Agustín Rossi, el rector de la UNR, Darío Maiorana, el vicerrector Eduardo Seminara, el Secretario de Información Pública de la provincia de Santa Fe, Rubén Galassi y el interventor del Comfer Lic. Gabriel Mariotto.
El foro consistía en estar abierto a la participación de cualquier ciudadano, quien debía inscribirse en la entrada para luego ser llamado a disertar, y tenía un tiempo límite de 7 minutos para dar su discurso. Hubo más de 70 inscriptos, aunque al momento de ser llamados a realizar la exposición oral sólo se presentaron 50. A cada orador se le pidió que dejara en soporte impreso una copia de la disertación que hacía.
El aporte ciudadano fue de gran variedad, hubo representantes de comunicadores, periodistas, directivos de escuelas de periodismo y de la universidad, docentes universitarios, agrupaciones de indígenas, cooperativas, integrantes de la agrupación HIJOS, de Radio Comunitaria de Rosario, de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias.
A pesar de la diversidad de los participantes, todos coincidieron en la importancia de la sanción de una ley de la democracia, en la no vigencia de la ley 22.285 de la dictadura y en la modalidad de la consulta popular para la formulación definitiva del proyecto que irá al Congreso.
Foto: http://www.unr.edu.ar/
Suscribirse a:
Entradas (Atom)